La moral, la ética y la cultura
La Biblia, lo admitamos o no, no es un libro de historia ni de geografía, es un libro religioso, en el cual los cristianos encontramos la voluntad del Dios en el cual creemos.
A través de ella, nos relacionamos con ÉL, y lo que en ella se afirma, lo creemos por FE.
Lo que está en juego es nuestra vida eterna. Así de simple y así de complejo.
El problema se presenta cuando los asuntos a poner sobre la mesa, lejos de ser “espirituales”, son de índole moral y éticos, y para resolverlos, acudimos ciegamente a La Biblia, sin tener en cuenta el contexto en que fueron escritos.
Sabemos que el relato bíblico transcurrió a través de miles de años, y que fueron narrados por seres humanos como cualquiera de nosotros, quienes no pudieron evitar de impregnar sus dichos, con la cultura que los rodeaba.
Pero resulta que algunos cristianos, sin que nadie se los pida, y creyéndose los exegetas indiscutidos y necesarios, pretenden que sus interpretaciones personales acerca de cuestiones de índole exclusivamente ético, sean la verdad para ellos, y para todos.
Moral, ética y cultura, no son la misma cosa.
La moral es la suma de los principios de conducta que hemos adquirido a través de las costumbres y valores del medio donde hemos vivido. Aceptados por la sociedad como válidos.
La ética, no la rechaza ni se le opone, solo cambia su naturaleza. Lo recibido en forma natural y pasiva (lo moral), lo transforma en algo racional, que luego y en total libertad, ponemos en práctica, o no.
Por su parte, la cultura, es la consecuencia de la sumatoria de ambas, y se materializa en las sociedades a través del tiempo.
Los cristianos podemos aceptar como válidos los valores morales descriptos en La Biblia, pero de ninguna manera podemos pretender que los valores éticos y culturales, tengan validez indiscutida en los tiempos que corren.
Los hermanos a los cuales aludimos, probablemente con buenas intenciones, pretenden transmitir a sus eventuales oyentes, sus gustos personales respecto a cuestiones éticas.
¿A qué cuestiones suelen referirse?, prácticamente a todas. Nada queda en el tintero para ellos.
Cómo debemos vestirnos, qué música debemos escuchar, qué debemos cantar, cómo deben ser los cultos, cómo debemos adorar, las mujeres en el culto, la familia.
Opinan acerca del baile, nos sugieren con quien debemos casarnos, nos indican cuantas veces debemos asistir a la iglesia, nos dan instrucciones acerca del celibato, el sexo, la prosperidad, el diezmo, y otras.
¡Temas que por supuesto nada tienen que ver con el plan del Dios de La Biblia para nuestra salvación!
Para ello, seleccionan ciertos versículos bíblicos que luego te tiran por la cabeza.
Pero existe un pequeño detalle, esconden algunos versículos, o lo que es peor, no los conocen.
Voy a dar algunos ejemplos bíblicos relacionados con la cultura.
1 -La esclavitud, existía en los tiempos del AT y NT y como tal era admitida por todos, incluidos los apóstoles Pablo y Pedro quienes, aceptando la cultura de la época, recomiendan a los esclavos, respetar a sus amos y trabajar duro para ellos.
Lo leemos en 1ªCorintios 7:21-22, Filemón 1:16, 1ª Timoteo 6:1, 1ªPedro 2:18 y otros.
En la actualidad, si alguno de nosotros tuviera esclavos o estuviera de acuerdo con la esclavitud, iríamos presos, junto con Pablo y Pedro.
2 -Pablo manifiesta abiertamente en 1ª Corintios 7:38, que estaba de acuerdo con que “un padre de familia”, determine, si sus hijas vírgenes debían casarse, o no.
Yo tengo tres hijas…sin comentarios.
3 -Hay hermanos, que exigen a las damas de su congregación, que no deben utilizar ropa de varones, me refiero a los pantalones.
Estos hermanos se apoyan en un versículo del AT, que encontramos en Deuteronomio 22:5 “…no vestirá la mujer traje de hombre…” parece estar muy claro, pero algunos versículos más adelante en Deuteronomio 23:1 leemos “No entrará en la congregación de Jehová el que tenga magullados los testículos o el miembro viril amputado”
Debemos ponernos de acuerdo, o ponemos en práctica los dos versículos o ninguno.
4 -Vemos en las redes a hermanitos discutiendo si está bien o está mal que “los varones” admiremos, entre otras cosas, la belleza de una mujer. ¿Dónde está escrito que no lo hagamos? ¿Cómo creen que descubrí hace 53 años a mi esposa?
Los “PRINCIPIOS MORALES” que el Dios de la Biblia nos propone, nunca cambiarán, son inmutables.
Pero, las normativas humanas, la cultura misma, podrán cambiar adaptándose a los pueblos, a sus tradiciones y a sus costumbres.
La música, es el mejor ejemplo.
Recuerdo cuando hace 50 años la batería era un pecado en el culto…Je Je Je
Juan Alberto Soraire
Un cristiano del montón