¡No por obras, para que nadie se gloríe!

Solo para cristianos, y curiosos desencantados.

¿Alguna vez escuchaste la afirmación bíblica, que es el título de este posteo?

Si eres un habitual lector de La Biblia, sea esta católica, protestante o la que fuera, deberías conocerlo.

Pero, si a pesar de auto considerarte cristiano, nunca habías leído o escuchado esta importante verdad, es porque definitivamente no tienes la menor idea acerca de lo que La Biblia afirma. Te culpo a medias.

Por supuesto que no es mi deseo complicarte la vida, pero como lo que está en juego es tu salvación, tu vida eterna, y tu deseo de ir al Cielo, creo que vale la pena prestes atención a lo que tengo para decirte.

Como mi opinión en particular no tiene ningún valor en sí mismo, no tengo otra alternativa para dilucidar el tema, que acudir, como corresponde, a La Biblia.

Ahora bien. Te consideras cristiano, crees en Jesucristo, pero por tu desconocimiento de La Biblia, no tienes muy en claro que hizo, porqué lo hizo, para que lo hizo, por quien lo hizo, etc. Solo de una cosa estás seguro/a, el día que te toque partir de este mundo, quieres ir al Cielo.

¿Qué te contaron acerca de lo que La Biblia afirma al respecto?

Para comenzar, Dios dice en su palabra que:

“Por cuanto todos pecaron, están destituidos de la gloria de Dios” Romanos 3:23

Si, ya sé, no me digas nada, vos no te consideras un pecador. Eres una excelente persona, nunca mataste a nadie, no robaste, eres fiel en tu matrimonio, vas todos los domingos a la Iglesia, etc. y te entiendo, porque yo pienso lo mismo de mí.

Pero “todos”, es “todos”, aquí y en la China; vos, yo y todos los seres creados, al menos que consideremos a Dios un mentiroso.

Como podrás ver, el diagnóstico es preocupante y me permito asegurarte que, al igual que los tripulantes de la Apolo XIII, ¡Estas en problemas!

¿Cuáles fueron las soluciones, a mi entender burocráticas, que te ofrecieron hasta ahora?

-Te dijeron que había dos tipos de pecado, los de poca importancia (veniales) y los importantes (mortales). Con los primeros te ibas al Purgatorio y con los segundos, te vas de cabeza al infierno. De hecho, nunca te mostraron el correspondiente listado.

Te confirmo que no encontramos tal diferenciación en La Biblia, los hechos de los seres humanos que van contra la voluntad de Dios, La Biblia los llama pecado y punto.

Pecado es, en términos simples, estar alejado de Dios.

-Te dijeron, además, que debías bautizarte de pequeño (situación que vos no manejabas). Que el bautismo borraba tus pecados y te libraba del infierno. No encontramos en las escrituras afirmación tan rotunda, como tampoco el bautismo de un solo niño.

Una alternativa sería imitar a Constantino I, que se bautizó justo antes de morir, hecho que no deja de ser una buena idea, aunque con ciertos riesgos.

-También te dijeron que, para borrar tus pecados, deberías confesarlos a otro ser humano, un pecador como vos, quien, en nombre de Dios, te los perdonaría, sin antes cumplir con la penitencia.

O sea que, por cumplir una penitencia, lograrás el perdón de tus pecados. Un trámite, fácil, rápido y efectivo.

Convengamos que hoy casi nadie se confiesa.

-Te aseguraron, asimismo, que, para ir al Cielo, debías de cumplir con los sacramentos. Probablemente no te acuerdes siquiera cuales son los sacramentos y mucho menos los cumplas.

-Te aseguraron también, que, ante una eventualidad, como puede ser morirte antes de lo que lo tenías previsto, con algún pecado a cuestas, tenías un “bonus track”, que consistiría en pasarte algunos miles de años en el Purgatorio (que tampoco es mencionado en La Biblia y del cual ya nadie se hace cargo)

-Tus eventuales asesores, te sugirieron y permitieron que te arrodillaras frente a imágenes, estatuas, muertos, restos de muertos, reliquias, etc, pero no te advirtieron que el Dios de La Biblia condena expresamente estos hechos.

-De igual manera, te permitieron que hicieras sacrificios, que te enclaustraras en un convento, que lastimaras tu cuerpo, o te metieras la mano en el bolsillo creyendo que con eso comprarías a Dios por tus pecados. Indulgencias de antaño, sobornos de ahora.

Cabe entonces una reflexión.

Si nosotros, los seres humanos, podemos salvarnos a nosotros mismos, a través de nuestro propio sacrificio y esfuerzo personal, incluido el bonus track del purgatorio…

¿PARA QUÉ MURIÓ CRISTO EN LA CRUZ?

Te pregunto una vez más, si podemos ganar el Cielo, por nuestras propias obras y méritos… ¿Para qué murió Cristo en la cruz?

A ver si te queda claro, NADA tienes que hacer para ir al Cielo, lo que había que hacer YA LO HIZO CRISTO por vos.

“Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en el crea no se pierda más tenga vida eterna” Juan 3:16

Volvamos al título de este posteo: “No por obras, para que nadie se gloríe”. Encontramos esta afirmación en Efesios 2:9

“Por gracia ustedes son salvos, por medio de la FE, y esto no es de ustedes, pues es don de Dios, no por obras, para que nadie se gloríe”

Presta atención, a los dos versículos que leímos. Ambos aseguran que la VIDA ETERNA se logra solo por CREER, solo por FE. (subrayado)

Ahora bien, ¿Cuál es la parte que no se entiende?

La Biblia nos asegura que el día que aceptes a Cristo como tu salvador, por FE, comenzará una nueva vida para vos.

Te librarás de la carga de trabajar para lograr tu propia salvación, ahora trabajarás para hacer la voluntad de tu Señor, de tu salvador, de tu Dios.

La pelota queda una vez más de tu lado, te toca jugar a vos.

PD: Si te metí en un lío perdóname, sucede que te quiero ver en el Cielo.

Juan Alberto Soraire

Un cristiano del montón